Novedades sobre el proyecto Belgrado Waterfront
Cuando informamos por última vez sobre el proyecto Belgrado Waterfront en 2015, todavía había esperanza de que ocurriese algo maravilloso y que el proyecto se detuviera. Hoy en día podemos ser testigos de los cambios que se produjeron con la corrupción, los intereses privados y la codicia, que se anteponen al interés público y marginan a la profesión de la arquitectura y la planificación urbana.
El Dubai de los Balcanes
Las obras de construcción del proyecto Belgrado Waterfront y sus lujosos rascacielos, apartamentos y centros comerciales están en curso. El área, que una vez fue reconocida como de interés nacional debido a su potencial de desarrollo para uso público, se convirtió en un patio de recreo del gobierno nacionalista de Serbia junto con sus amigos e inversores de los Emiratos Árabes Unidos. Están decididos a transformar Belgrado en el Dubai de los Balcanes. El uso público no es algo habitual en su vocabulario.
Un proyecto para la élite
Hay muchas razones para la rabia, la protesta y las objeciones que se han generado. Principalmente, por la forma en que se está llevando a cabo el desarrollo del proyecto: las familias han sido trasladadas de sus casas para propociornar espacio al nuevo desarrollo. Los documentos legales y de planificación han sido modificados de acuerdo con las necesidades de los responsables políticos y financieros. Las instituciones o los profesionales locales no han tenido ninguna influencia en el proyecto. Como resultado, la arquitectura sin rostro se topa con una ciudad histórica. No hay transparencia sobre el respaldo financiero. Los apartamentos no estarán disponibles para el ciudadano medio: un metro cuadrado cuesta 7.000 euros, el salario medio mensual en el país es de 375 euros.
«Let´s Not Drown Belgrade»
El movimiento de protesta «Let´s Not Drown Belgrade» («No Ahoguemos a Belgrado») reaccionó continuamente en oposición al proyecto Belgrado Waterfront a través de denuncias oficiales, análisis de expertos y organizando masivas protestas urbanas contra las irregularidades del proyecto. La iniciativa está reconocida como un valiente ascenso hacia la democracia y la sociedad civil. Sin embargo, sus acciones no han puesto realmente en peligro la implementación del proyecto.
Si tenemos la oportunidad de poneros al día sobre el Belgrado Waterfront en un futuro, os haremos saber qué se siente al moverse entre dos mundos: el exclusivo Dubai de los Balcanes y el auténtico, que es tan acogedor como duro, donde los ciudadanos medios ganan sus salarios.
Texto: Vesna Vučinić, GA Belgrade
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